Ziortza Karranza, sexóloga y psicóloga de Gurenduz, analiza los elementos de la escritura a través de los que “hablamos” de nosotros mismos sin saberlo. Así por ejemplo, una letra legible habla de una persona que busca la comprensión de los demás. La C es la letra del afecto, la G es la letra de la sexualidad y el punto sobre las íes es todo un mundo: un punto con forma de círculo muestra a alguien imaginativo. Ziortza recuerda que mientras los textos habla sobre cómo nos mostramos ante la sociedad, la firma desvela cómo nos sentimos y también explica que no hay dos letras iguales.